Acaricia mi cuerpo con suavidad de astro. No esta desnudo sino cubierto de un velo hidratante que lo protege de tus rayos dañinos.
Sólo
quiero tu calor y tu bonanza, pero no me hagas daño. Estoy preparada para
aprovechar lo bueno y rechazar lo malo.
Me
das energía y vida cuando brillas
potente desde el amanecer al ocaso.
Me
gusta pasear bajo tus luminosos abrazos. Me cuido, eso si, me doy crema, se la
doy a mis hijos. Aprovecho para acariciarles, para abrazarles con sumo cuidado,
antes de salir a disfrutar de tu calor. Antes de dejarles contigo, les preparo.
No
te quiero enlatado, te prefiero al natural y con mesura.
No
en cualquier momento, no me quemes, no me dañes, cuando estas doloso, me cubro,
me escondo, me cuido.
Me
pongo la pamela, le coloco la visera a mis hijos, jugamos, reímos.
Me
hidrato, no seques mi cuerpo, bebo de ti sin excesos.
Tú
nos das la vida, nos das calor y abrigo, nos haces sonreír y estamos perezosos
y huraños cuando te escondes juguetón tras las nubes.
Cada
mañana sales a alegrarnos el día, cada noche te retiras cansado a tu lecho y le
das el relevo a la luna. Que brilla por ti, también. Lo sabes.
Ha
pasado el verano y nuestra piel tostada por el efecto de tus rayos pero
protegida, se muestra hermosa y joven.
No
nos hagas daño, sólo queremos tu bonanza.
Eres
la vida en su esencia misma, para mí, para mis hijos, para mis flores, para mis
plantas.
Eres
todo energía, una gran bola de fuego que nos quiere atemperar, sin llegar a
quemar.
Estas
lejos, pero te sentimos cerca todo el tiempo. Demostrando todo tu poderío
cuando alcanzas el cenit en el cielo azul, en su inmensidad brillante.
Estamos
preparados, brilla sobre nosotros, sabemos que eres poderoso, pero, no te
tememos, te amamos.
Eres
libre para pasear entre nosotros y nosotros libres de disfrutarte a nuestro
antojo.
El
milagro de la vida, es, que pase lo que pase, por larga que sea la noche., finalmente
resplandeces con tu luz, para acompañarnos en nuestro camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
déjame tus palabras, acompañando a las mías...